REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA
TRIBUNAL SUPREMO DE JUSTICIA
JUZGADO PRIMERO DE PRIMERA INSTANCIA EN LO CIVIL, MERCANTIL Y TRÁNSITO DE LA CIRCUNSCRIPCIÓN JUDICIAL DEL ESTADO YARACUY.
SAN FELIPE, QUINCE (15) DE FEBRERO DE 2019
AÑOS: 208° Y 159°
EXPEDIENTE: N° 14.373
MOTIVO: PARTICIÓN DE BIENES.-
PARTE DEMANDANTE: Ciudadano ROBERT JOEL RIVAS, venezolano, mayor de edad, titular de la cédula de identidad Nº 11.652.024, de este domicilio.
APODERADOS JUDICIALES DE LA PARTE ACTORA: Abogados PEDRO JOSÉ CARDENAS PEÑA y LEONARDO MIGUEL YEPEZ CASTILLO, inscritos bajo los Inpreabogado Nros. 101.979 y 113.344, respectivamente. (folio 12)
PARTE DEMANDADA: Ciudadanos MIRIAN ROSA RIVAS DE GONZÁLEZ, CARMEN MARIBEL RIVAS y RICHAR GERMAN RIVAS, venezolanos, mayores de edad, titulares de las cédula Nros. 7.910.385, 10.366.061 y 10.366.064 respectivamente, domiciliados en la avenida principal de Palito Blanco, casa sin numero al lado del Club Royal, Municipio La Trinidad del estado Yaracuy.
Revisadas las actuaciones contenidas en la presente causa, este Tribunal hace las siguientes consideraciones:
Se recibió por distribución el 10 de noviembre de 2010, la presenta demanda de PARTICIÓN DE BIENES, interpuesta por el Ciudadano ROBERT JOEL RIVAS, ut supra identificado, asistido por el abogado PEDRO JOSÉ CARDENAS PEÑA, inscrito bajo el Inpreabogado Nº 101.979, contra los MIRIAN ROSA RIVAS DE GONZÁLEZ, CARMEN MARIBEL RIVAS y RICHAR GERMAN RIVAS, ut supra identificados.
El 11 de noviembre de 2010, mediante auto este Tribunal admitió la presente demandada y ordenó emplazar a la parte demandada ciudadanos MIRIAN ROSA RIVAS DE GONZÁLEZ, CARMEN MARIBEL RIVAS y RICHAR GERMAN RIVAS, con el fin de dar contestación a la demanda. (Folio 11).
El 16 de noviembre de 2010, compareció por ante este Tribunal la parte actora ciudadano ROBERT JOEL RIVAS, donde otorgo poder apud acta a los abogados PEDRO JOSÉ CARDENAS PEÑA y LEONARDO MIGUEL YEPEZ CASTILLO, inscritos bajo los Inpreabogado Nros. 101.979 y 113.344, respectivamente, el cual fue debidamente certificado por la Secretaria del Tribunal. (Folio 12).
El 24 de enero de 2011, el Alguacil de este Tribunal consignó boletas de citación de la parte demandada debidamente firmadas. (Folios 13 al 18).
El 21 de febrero de 2011, la Secretaria de este Tribunal dejó constancia de que venció el lapso para dar contestación a la demanda. (Folio 19).
El 16 de marzo de 2011, los apoderados judiciales de la parte actora consignaron escrito de pruebas. (Folio 20).
El 22 de marzo e 2011, este Tribunal dictó auto donde ordenó la notificación de las partes a los fines que designen partidor en el presente juicio y libró boletas de notificación. Se ordenó agregar a los autos, las pruebas consignadas. (Folios 21 al 26).
El 23 de marzo de 2011, este Tribunal mediante auto ordeno corregir foliatura. (Folio 30).
El 06 de abril de 2011, el Alguacil de este Tribunal consignó boletas de notificación de la parte demandada debidamente firmadas. (Folios 31 al 36).
El 08 de abril de 2011, el Alguacil de este Tribunal consignó boleta de notificación de la parte actora debidamente firmada. (Folios 37 y 38).
El 13 de abril de 2011, este Tribunal dejó constancia que la parte demanda no compareció al acto de designación de partidor. (Folio 39).
El 5 de mayo de 2011, este Tribunal dejó constancia que las partes no comparecieron al acto de designación de partidor y este Tribunal designó como partidor al ciudadano OSBART SEGURA, y se libro boleta de notificación. (Folios 40 y 41).
El 12 de mayo de 2011, el Alguacil de este Tribunal consignó boleta de notificación del ciudadano OSBART SEGURA, debidamente firmada. (Folios 42 y 43).
El 16 de mayo de 2011, tuvo lugar el acto de juramentación del partidor designado por este Tribunal ciudadano OSBART SEGURA. (Folio 44). Asimismo se ordeno librar credencial al partidor designado por este Tribunal. (Folio 45).
El 11 de febrero de 2019, el Juez EDUARDO JOSÉ CHIRINOS, se abocó al conocimiento de la causa. (Folio 96).
Ahora bien, este Tribunal, a los fines de pronunciarse sobre la procedencia de la perención de la instancia, conforme a lo establecido en el artículo 267 del Código, hace las siguientes consideraciones:
RATIO DECIDENDI
(Razones para decidir)
Los procesos son una serie de actos coordinados para el logro de un fin determinado, y en sentido procesal, es el camino a seguir para resolver las controversias que se llevan a los estrados judiciales. El objeto del mismo es la pretensión procesal o petición que formula el demandante al juez o jueza para que dicte una resolución que, con autoridad de cosa juzgada, ponga fin de una manera definitiva e irrevocable al litigio planteado.
Siendo así, la sentencia definitiva pronunciada por el juez o jueza constituye el modo normal de terminación del proceso, sin embargo, existen otros modos de llegar a esta etapa, los cuales son excepcionales o especiales por su esencia como la transacción, conciliación, desistimiento, convenimiento o perención.
Es criterio jurisprudencial dictado por la Sala Político Administrativa del Tribunal Supremo de Justicia, en fecha 09 de noviembre de 2010, expediente N° 2005-4749 partes: Edgar Tomás Meléndez interpone demanda contra las sociedades mercantiles Sistema Hidráulico Yacambú Quibor, C.A., y Dell Aqua, C.A., caso: enfermedad profesional; a la que este Juzgador se acoge, el cual señala que la perención de la instancia es un mecanismo anómalo de terminación del proceso, en el sentido de que el pronunciamiento dictado por el operador de justicia que declare la perención, no produce cosa juzgada material.
Por otra parte define la doctrina venezolana que el fundamento de la perención es la presunción iuris et de iure de abandono de la instancia, por la inactividad de las partes por el tiempo establecido en la ley. La razón de la misma es que el Estado, después de un periodo de inactividad prolongado, entiende librar a los propios órganos de administración de justicia de la necesidad de proveer las demandas y de todas las obligaciones derivadas de la relación procesal. La perención tiene por efecto la extinción de la instancia, es decir, la anulación del proceso, dejando viva la acción, pudiendo el accionante interponer nuevamente la acción en similares términos en que fue propuesta anteriormente, siempre que se encuentre dentro del lapso legal establecido a tales fines.
Así pues, se constituye entonces el referido instituto procesal como un mecanismo legal diseñado con el propósito de evitar que los procesos se perpetúen y los órganos de administración de justicia deban procurar la composición de causas en las cuales no existe interés de los sujetos procesales.
En tal sentido el artículo 267 del Código de Procedimiento Civil, reza lo siguiente:
“...Toda instancia se extingue por el transcurso de un (1) año sin haberse ejecutado ningún acto de procedimiento por las partes. La inactividad del Juez después de vista la causa, no producirá la perención”.
Lo significativo de la perención de la instancia es el efecto procesal extintivo del procedimiento, causado por la inactividad de las partes durante el plazo determinado en el artículo 267 del Código de Procedimiento Civil. La función de la perención, no se agota en la cuestión adjetiva, sino que tiene fundamento en la misma necesidad social de evitar la litigiosidad cuando no mide interés impulsivo de las partes contendientes, pues para el Estado es más importante el mantenimiento de la paz, que la protección de aquellas pretensiones huérfanas de tutor de la carrera procesal.
Consecuentemente a este fin, la perención está concebida por el legislador como norma de orden público, verificable de derecho y no renunciable por convenio entre las partes, pudiéndose declarar aún de oficio por el Tribunal, todo lo cual resalta su carácter imperativo.
Asimismo, la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia, en sentencia N° 853, de fecha 5 de mayo de 2006, caso: Gobernación del Estado Anzoátegui, citada en fecha 04 de marzo de 2011, expediente N° 10-1029, caso: BANESCO BANCO UNIVERSAL, C.A. contra la empresa Inversiones 431.799, C.A. y los ciudadanos Juan Carlos Cabrera y Olga María Troconis Atencio, bajo la ponencia de la Magistrada LUISA ESTELA MORALES LAMUÑO, indico lo siguiente: Que “(…) la declaratoria de perención opera de pleno derecho, y puede ser dictada de oficio o a petición de parte, sin que se entienda en esta frase que existe en cabeza del juzgador un margen de discrecionalidad para el decreto de la misma…”.
Por otra parte, en sentencia Nº 713 del 8 de mayo de 2008 de la Sala antes mencionada, citada en fecha 04 de marzo de 2011, expediente N° 10-1029, caso: BANESCO BANCO UNIVERSAL, C.A. contra la empresa Inversiones 431.799, C.A. y los ciudadanos Juan Carlos Cabrera y Olga María Troconis Atencio, bajo la ponencia de la mencionada Magistrada, se señaló:
“(…) ‘La perención de la instancia constituye una sanción contra el litigante negligente, que se produce con motivo de un estado de inactividad de la causa. Por mandato del artículo 269 del Código de Procedimiento Civil, se verifica de pleno derecho, no es renunciable por las partes y, puede ser declarada de oficio por el tribunal. Se trata de evitar que los juicios permanezcan sin impulso procesal de manera indefinida; disminuyéndose los casos de paralización de las causas durante largos períodos, favoreciendo así la celeridad procesal’. (Sentencia N° 1828 del 10 de octubre de 2007). Como se puede apreciar, ha sido criterio reiterado de esta Sala Constitucional, que la perención opera de pleno derecho, y debe ser declarada por el tribunal, incluso de oficio.
Así las cosas, no le queda algún tipo de duda a este órgano jurisdiccional, que una vez constatados los supuestos de hecho previstos en el artículo 267 del Código de Procedimiento Civil, -en cualquiera de sus numerales-, independientemente del estado y grado de la causa, ha de declararse la perención de la causa como consecuencia jurídica allí establecida, no siendo óbice para ello, el que no hubiese sido solicitado por las partes (…)”.
Ahora bien, tomando en cuenta las citas transcritas anteriormente y tal como se observa en el presente expediente, donde la última actuación considerada de impulso válido para continuar el curso de ley de la causa y por ende para interrumpir la perención anual, fue el 16 de marzo de 2011, donde los apoderados judicial de la parte actora Abogados PEDRO JOSÉ CARDENAS PEÑA y LEONARDO MIGUEL YEPEZ CASTILLO, inscritos bajo los Inpreabogado Nros. 101.979 y 113.344, respectivamente, consignaron escrito de promoción de pruebas constante de tres (03) folios útiles sin anexos (folio 20), y desde esa oportunidad han transcurrido SIETE (07) AÑOS, DIEZ (10) MESES Y DIECISEÍS (16) DÍAS, sin que la parte haya acudido a impulsar la causa, y para los efectos procedimentales se traduce en una DISCONTINUIDAD MATERIAL DE LA INSTANCIA, que consiste en una sanción a las partes que por negligencia o descuido, hayan abandonado el juicio por un lapso determinado; es por lo que este Tribunal de conformidad con el artículo 267 del Código de Procedimiento Civil, debe declarar de oficio la perención en el presente juicio, como así se hará saber de forma clara, precisa y positiva en el dispositivo del presente fallo y así se decide.
Por los razonamientos anteriormente explanados, a la luz del artículo 321 del Código de Procedimiento Civil los Jueces deben procurar acogerse a la doctrina casacionista establecida en casos análogos para defender la integridad de la legislación y la uniformidad de la jurisprudencia, este operador de justicia considera perfectamente aplicable al caso bajo estudio los criterios jurisprudenciales in comento, por lo que inexorablemente este Tribunal Primero de Primera Instancia en lo Civil, Mercantil y Tránsito de la Circunscripción Judicial del Estado Yaracuy, administrando justicia en nombre de la República Bolivariana de Venezuela y por autoridad de la Ley de conformidad con el artículo 267 del Código de Procedimiento Civil:
DECLARA,
PRIMERO: LA PERENCIÓN DE LA INSTANCIA en el presente juicio de PARTICIÓN DE BIENES, interpuesto por ciudadano ROBERT JOEL RIVAS, ut supra identificado, contra los ciudadanos MIRIAN ROSA RIVAS DE GONZÁLEZ, CARMEN MARIBEL RIVAS y RICHAR GERMAN RIVAS, ut supra identificados.
SEGUNDO: En consecuencia extinguida la instancia imponiéndose a la parte actora la sanción establecida en el artículo 271 del Código de Procedimiento Civil, que impide el nuevo planteamiento de la demanda por un plazo de noventa (90) días continuos a partir de la firmeza del presente fallo.
TERCERO: NO HAY CONDENATORIA EN COSTAS conforme a lo establecido en el artículo 283 del Código de Procedimiento Civil.
PUBLÍQUESE, REGÍSTRESE Y DÉJESE COPIA CERTIFICADA.
Dada, firmada y sellada en la Sala de Despacho de este Juzgado Primero de Primera Instancia en lo Civil, Mercantil y Tránsito de la Circunscripción Judicial del Estado Yaracuy. En San Felipe, a los quince (15) días del mes de febrero del año dos mil diecinueve (2019). Años: 208° Independencia y 159° Federación.
El Juez,
Abg. EDUARDO J. CHIRINOS CH.
El Secretario,
Abg. ELVYN J. QUIROGA BAUDIN.
En esta misma fecha y siendo las diez y treinta de la mañana (10:30 a.m.) se publicó y registró la anterior decisión.
El Secretario
Abg. ELVYN J. QUIROGA BAUDIN.
EJCH/EQ/yr
Exp N° 14.373
|