Pues bien, en el caso in examine, los errores detectados por este tribunal no están precisamente en la sentencia sino en cada uno de los montos de los conceptos demandados y narrados en el libelo, es decir montos mal calculados que adulteraban el petitorio; al ser fallas de cálculos aritméticos y desde el punto de vista de la uniformidad sentencial alteraban y afectaban la sentencia como tal. Esto, por cuanto no existe ninguna norma especifica que permita el desligue de los montos respecto a los conceptos; el concepto es uno solo (monto y denominación).y al variar el monto varia el concepto, es una lógica evidente, que se aprecia al comparar los montos del libelo y los que ven reflejados en el contenido de la sentencia.
Ahora bien, si la parte favorecida por la sentencia, es decir el demandante, considera que se ve afectado por la decisión en la misma, debe usar los recursos correspondientes a fin de que la alzada emita su pronunciamiento. Así se declara.